California ha declarado desde ayer el estado de emergencia debido a una fuerte tormenta que ha generado olas de 12 metros en el mar, recogiendo lluvias torrenciales sobre un terreno ya saturado y ha provocado advertencias de inundaciones y corrimientos de tierra.

Según el Servicio Meteorológico Nacional, se preveía que la tormenta del miércoles derribara árboles, causara inundaciones generalizadas, arrasara autopistas, obligara a derrumbarse laderas y ralentizara aeropuertos.

En el aeropuerto de San Francisco se han cancelado más de 70 vuelos hasta el mediodía del miércoles. La zona se prepara para una tormenta devastadora con potentes vientos y copiosas cantidades de lluvia. La interrupción relacionada con la tormenta del miércoles es menos grave que la avería de Southwest Airlines de la semana pasada, que provocó la cancelación de cientos de vuelos, sobre todo en Oakland y San José.

49 de los 74 vuelos cancelados en el Aeropuerto Internacional de San Francisco (SFO), donde el miércoles se cancelaron el 7% de las llegadas y salidas, eran operados por la aerolínea regional Skywest Airlines.

El miércoles se cancelaron casi 1 de cada 10 vuelos en todo el país con destino a SFO.

Se recomienda que antes de llegar al aeropuerto, los viajeros que salgan de San Francisco consulten las notificaciones de vuelo de su aerolínea.