Israel volverá a abrir sus fronteras a todos los turistas extranjeros, independientemente de su estado de vacunación. Desde enero sólo se permitía la entrada en el país a los visitantes extranjeros totalmente vacunados, pero esta regla terminará a partir del 1 de marzo. Los turistas que entren en Israel deberán pasar dos pruebas de PCR, una antes de la salida y otra después de la llegada.
Las autoridades también están aliviando las restricciones a los ciudadanos israelíes, que ya no tendrán que someterse a una prueba de RCP antes de sus vuelos, sino sólo después de llegar al país. Los israelíes no vacunados ya no tendrán que pasar la cuarentena a su regreso si dan negativo.

Las autoridades podrían reimponer, prorrogar, suavizar o modificar cualquier restricción con poco o ningún aviso, en función de la actividad de la enfermedad en las próximas semanas.